El actor español Javier Bardem valoró para la Agencia EFE su nominación al Premio PLATINO a la Mejor Interpretación Masculina por Loving Pablo. "El hecho de que reconozcan el trabajo de uno es un extra, un apoyo sustancial a esa película para que se siga viendo. Con lo cual en ese sentido estoy muy contento. No lo tomo en un terreno personal. Me hace ilusión pero no considero que mi trabajo sea ni mejor ni peor que el de otros actores".
Bardem comparte nominación junto a otros grandes nombres de la actuación iberoamericana como Alfredo Castro, por Los Perros; Daniel Giménez Cacho, por Zama; Javier Gutiérrez, por El Autor y Jorge Martínez, por Últimos días en La Habana. El próximo 29 de abril en una gala que celebrará en el Teatro Gran Tlachco de Xcaret (Riviera Maya, México) se conocerán a los ganadores de esta y las otras dieciséis categorías de los primeros galardones globales del séptimo arte en portugués y español.
El ganador de seis Premios GOYA, una concha de PLATA del Festival de San Sebastián, Copa Volpi del Festival de Venecia, Mejor Interpretación Masculina en Cannes, Oscar y así hasta 101 galardones; también destacó la importancia de la distinción creada por EGEDA y FIPCA para el cine de la región, "el hecho de que existan los PLATINO es para que los países iberoamericanos podamos intercambiar nuestras películas. Si hay una película premiada en los PLATINO, se recibirá con más interés".
En sus más de 30 años de trayectoria artística Bardem ha dado vida a personajes complejos que le han exigido ofrecer el máximo de su talento como Ramón Sampedro en Mar Adentro, Uxbal en Biutiful o Pablo Escobar en Lovin Pablo. A todos ellos se ha enfrentado con ímpetu, "tengo que entender el personaje desde la entraña; necesito realmente sentir un impulso a la hora de trabajar y así funciono; a veces me sale mejor, a veces peor".
Almodóvar, González Iñárritu, Alex de la Iglesia o Fernando León de Aranoa son algunos de los cineastas referentes iberoamericanos a los que el actor ha brindado sus dotes interpretativas. Para él ha supuesto "un lujo haberlos visto trabajar su gran talento", y añade que en todos ha reconocido "la debilidad, la inseguridad el miedo, la necesidad de superación, hasta en el más grande de todos: es maravilloso ver cómo se la juega y cómo sufre cuando dice ´acción".